martes, 12 de julio de 2011

Contando con el Vago

Hoy quiero hacer una pequeña intervención en mi espacio para contarles un suceso acaecido hace pocos días. Como algunos otros textos que he escrito aquí, este también se puede catalogar bajo la subcategoría ‘Chiste interno’… por lo que si ves que no entendes mucho de lo que hablo abandona el texto bajo el pretexto ‘el Halcón está mamado’ y volve para el próximo… o no vuelvas… ¡a nadie le importa!

Una aclaración antes de arrancar y después de la aclaración anterior… olvidé en mi último texto enmendar un error que prometí solucionar. Hace pocos días se liberó un texto en el que no mencioné a mi mayor seguidora y mejor ‘comentatriz’, que es mi gran amiga, mejor bloggera y aún mejor Rosarina, la Any.

Bien… saldado este error acompañado de mis más sinceras disculpas para con ella, prosigo con lo que venía…

¡Qué disparate que no hay forma de que mis textos sean cortos! Arranco a escribir pelotudeces y no paro.

Como todos ya saben, dos de mis mayores amigos de la vida son el Señor gerente y Vago. El tema que hoy nos ocupa refiere a este último. El día Jueves de la semana pasada él logró, muchos seguimos sin saber cómo, recibirse de vaya uno a saber qué (creo que tiene algo que ver con la confección de arreglos florales para cumpleaños de quince… la carrera se llama algo así). Pero lo más lindo del tema es que el loquito este se portó muy bien y organizó en un par de días una muy linda fiesta.

El sábado sería la fiesta, de la que supimos en el trabajo el día viernes. Por esto solamente hubo tiempo de confirmar la asistencia a tan importante evento sin poder pensar mucho en cualquier otra cosa. Fue así que al retirarme ese día hacia mi casa, ya subido a mi limousine con chofer, surgió en mí una duda que fue creciendo en intensidad hasta convertirse en algo insoportable… cito mi pensamiento: ‘¿Será que los soretes de mi trabajo organizaron un regalo para Vago y me dejaron afuera, como tantas otras veces me han dejado afuera de algo? Voy a preguntarle al pibe cantina’. Debo aclarar aquí que el pibe cantina es un compa del trabajo, muy amigo del Vago (el cree que es mejor amigo que yo… pero está equivocado, está equivocado).

Así que le envié el siguiente sms al pibe cantina:

"Cantina, aquí Halcón. ¿Cómo anda? Bo, tenes idea si alguien dijo de comprarle a Vago algo para mañana??”

A lo que el pibe cantina me respondió, espero yo que en su momento de mayor soretismo del día:

“Capo, la verdad que no se habló nada pero es una buena, si se te ocurre algo avisa”

Creo que hasta los más tontos que me siguen puede deducir qué significa esto… en  la jerga populacha es un gran ¡manejate! Así que me lo tomé con calma y decidí esperar a que el nuevo día llegara con respuestas.

Llegó el nuevo día…

…Me duele la cabeza y tengo ganas de seguir durmiendo… pero el Vago se merece una linda sorpresa… así como yo merecía, cuando estaba de viaje con él, dormir en una puta cama y nunca pasó… de todas formas no creo que lo haya hecho de malo… si hubiese dormido al menos un par de noches sobre esas rocas, es muy pero muy probable que él me habría prestado su cama por unos días… quizá… bueno… de última yo soy mejor persona que él seguro…

A buscar los teléfonos de todos mis compañeros de trabajo. Ah, si…me faltó aclarar algo…hasta ese día contaba con tan solo cinco teléfonos de personas de mi trabajo, de las cuales tan solo iban tres a la fiesta. Así que me dispuse a buscar en un sistema de lo más amigable el resto de los 27 teléfonos de las personas que estaban invitadas.

Unas tres horas más tarde ya tenía todos los teléfonos… también tenía un odio adquirido para con el sistema que se negaba a darme de forma sencilla todos los teléfonos y por qué no, también tenía cierto resentimiento para con los soretes de mi trabajo que nunca pensaron en pasarme su celular en todo este año y así evitarme el trabajo este de esclavo…

Uf… me descargué…

Bueno… cuestión que con todos los números almacenados solo faltaba un paso más (o eso yo creía)… mandar la idea de comprar algo y esperar las n mil respuestas que iba a recibir, todas brindando ayuda, ideas, plata, etc. Fue así que escribí el siguiente mensaje para las treinta personas:

“Hola, soy Joven Halcón aunque algunos me llaman ‘APODO CENSURADO’. Soy cantante, actor, escritor y espero algún día titiritero. Hoy quiero hablarte de Vago y su recibimiento. ¿Te interesaría regalarle algo en grupo con tus hermanos y hermanas de ‘El conocimiento es la frontera del ser humano para el futuro’? ¿Qué? ¿Cuándo? ¿Cuánto? ¿Cómo? ¿¿¿¿Por qué????”

Por razones de seguridad y privacidad una serie de frases, nombres y palabras han sido alterados de la versión original del mensaje (palabras en italic).

Fue aquí cuando el mundo se me vino una vez más abajo… mientras yo esperaba una ayuda inconmensurable de todo este mundo de gente las respuestas recibidas fueron las siguientes:

“Si cuéntenme”

“Jaja... Si  me prendo al regalo, qué ni idea pero me sumo. Beso”

“¡¡Sí claro estoy!! ¡¡Qué bueno!!”

“Tas pasadoooooo Si anotame”

“Acepto pongo el dinero necesario siempre y cuando esto sea equitativo y todos pongamos por igual.”

“Jejeje claro! O sea, mi respuesta a tu 1era pregunta es si, a las otras ni idea!”

“Podría ser un tratamiento donde lo hizo Carlitos Muñoz para un implante capilar… maneja esa opción a ver si gusta!!!!”

“Cómo va? Buena idea, nos prendemos con tatata. No se nos ocurre aun q puede ser, pero si surge alguna idea t aviso. Nos vemos más tarde!”

“En lo q vayan a comprar conta conmigo para poner plata. Capaz q puede ser una lapicera grabada o algo parecido. Nos vemos esta noche.”

“Hola! yo no voy hoy pero colaboro en el regalo”

“Sí. Me sumo. Sds!”

“Si me parece bárbaro. Resuelvan y me dicen cuanto es. Tatata

“Jaja x mi si. abrazo”

“Si, y voto a favor de las demás decisiones. Pd. Deja de cambiar de teléfono sorete!”

“Dale. Si contame. Luego me decís cuanto es. Gracias!  Tatata

“Sí, daleee. Aunque no creo que para hoy nos dé el tiempo :). Una sesión de peluquería de woow podría ser jaja. Beso”

“Toy ahi! Cmo hacemos? Toy x tu barrio :-P”

“Me anoto a lo que decidan los hermanos y hermanas”

“Jajaja! Si m interesa jajaja! Cuando sepan el que? Cuánto? Etc decime”

“Sí, Uds digan y yo me prendo!”

“Muchas preguntas para un sábado. La única seguro es un si le quiero regalar. De las otras preguntas lo que quieran.”

Tatata. Van en orden: Si, algo para la casa, lo ideal sería hoy pero puede ser en la semana, alrededor de 200 pesos, por tatata link juntamos, porque va a ser un gran decorador de fiestas de 15!”


No creo que sea necesario que agregue absolutamente nada más, pero de todas formas lo voy a hacer. Es evidente por las respuestas de mis estimados compañeros de trabajo, que les sucede una de dos cosas. O me odian mucho e intentan no gastar mucha energía en mí o tienen serios problemas para escribir un mensaje de texto que supere por algún cuerpo el simple ‘ok’. Como se ve, salvo un par de buenas personas, el resto me respondió nuevamente el ‘manejate’ que el mismo pibe cantina me había dicho en su momento y que en este caso ni se dignó a mandar (respondió la patruna).

Así que allí estaba yo, una vez más atareado por algo que sabe dios por qué me propuse hacerlo… debo confesar que se me cruzó por la cabeza hacerme el ‘opa’, algo que me sale muy bien, y dejarla por esa. No entiendo bien qué fue lo que me llevó a decidir levantarme del sillón en el que me encontraba tan plácidamente tirado, pero luego de coordinar con Eltisnéé para ir juntos al shopping a comprar algo, logré levantarme y salí de la comodidad del hogar.

Allí empezó una nueva aventura de la que no voy a describir mucho, pero el problema de la misma se basó en no tener ni la más remota idea de qué le podíamos regalar a Vago. De pronto recordamos que el muy pelotudo se fue a surfear hace unas semanas con su netbook en el bolsillo (viaje del cual la misma nunca se recupero…), por lo que decidimos comprarle una nueva y mejor netbook que la que tenía con la condición de que vendiera la tabla de surf.

Y así fuimos… y se la dimos… la netbook… y que feliz que estaba… pobrecito… yo creo que incluso lloro…o eso quiero creer. Una cosa que debo destacar aquí es que cuando se le solicitó al Vago que nos saludara uno a uno, lo que hizo él fue saludar al pibe cantina y a su novia e irse, no sin antes decir “gracias a todos”. La verdad… pocas veces me he sentido tan pero tan completo.

Aún me dolía la espalda y la cabeza de las tres horas que pasé buscando en una web de lo más nefasta los teléfonos de todos mis compañeros, tenía hambre por haber salido temprano de casa para comprar el regalo y no haber regresado a la misma más que para bañarme muy rápidamente y envolver el regalo, aún tenía la tensión y el estrés de estar comprando algo que no sabía si sería del gusto del agasajado y de los demás agasajantes, y también tenía en mi cabeza la pendiente idea de que mi nueva tarjeta de crédito tenía una deuda a pagar en una cuota de lo más divertida… así que sí… lo que más esperaba era la gratitud de Vago para con su gran amigo, el pibe cantina… ¡qué felicidad!

Debo destacar que fue una noche mágica... terrible onda (que incluso me sorprendió porque por lo general en la oficina está todo mal)... buena música, mucho baile... en particular creo que esa noche la descocí bailando... mal... De esas noches que se dan sin que uno lo busque, pero se alegra de encontrarlas...

Y así comienza esta semana, intentando definir quienes fuimos efectivamente los obsequiantes del obsequio, de forma de poder sacar cuentas y de forma de en definitiva poder cobrarlas…

Como vivimos en un mundo nuevo, donde la tecnología lo es todo, ¿qué pudo haber pensado este joven halcón a la hora de cobrar los dineros adeudados? Como estoy hablando de mí mismo les voy a contestar lo que pensé… pensé que si todos hacían una transferencia bancaria a mi cuenta iba a poder centralizar toda la plata allí y de esta forma no tener ningún tipo de dramas con el cambio, con los totales, etc.

Lo que este pequeño halcón nunca consideró es que para la entidad financiera en cuestión, el hecho de recibir n mil depósitos del mismo monto constituye un posible fraude financiero… así que aquí me encuentro… esperando ser juzgado… muy alegre de haber tenido esa hermosa idea… y eternamente agradecido a todos mis compañeros de trabajo por declarar que ellos nunca realizaron ningún depósito en  mi cuenta…

Vago… que seas muy feliz con tu carrera, acá con el Guayinton (mi compañero de celda) estamos bárbaros.

Un saludo para todos los que me conocen…
JH.

2 comentarios:

popablopa dijo...

JA JA JA

Halcón! Te estás superando día a día! :) Creo que ya estoy entendiendo que para lograr escribir como vos, lo que me falta es... una vida como la tuya! Llena de emociones, sorpresas y amigos! :)

De todas formas, me alegra saber que estas feliz :)

Abrazo de gol,

Max

Liz Gandini dijo...

Jajajaja. Lo leí todo y sin recreo.
Volveré más seguido.

Liz.

P.D.: Hace años no comento un blog. Este mensaje ya lo escribí y desapareció antes de postearse. Veré si corro mejor suerte.