miércoles, 15 de junio de 2011

¿Por qué razón prefiero ver ‘Lo que el viento se llevó’ antes que cualquier partido de fútbol?


En el día de hoy no voy a decir nada nuevo, simplemente me voy a dedicar a decir cosas que ya se han dicho antes. Confieso que estoy un poco molesto. Se preguntaran ustedes mis querido lectores por la razón, y esta es muy simple… estuve con mi viejo viendo un partido de fútbol de su equipo, que según él sigue siendo el mío, y me enojé con el juego, los jueces, la tecnología y los comentaristas objetivos (ya que en ese canal ya no hay relatores).

La verdad que me sentí bastante frustrado viendo ese partido, no por los cuadros que jugaban ni por el juego, sino porque el fútbol… que fue descubierto por el siglo XIX… sigue siendo del siglo XIX. Yo propondría lo siguiente, o lo actualizamos a una versión más actual o lo reafirmamos cómo deporte de ese siglo.

Por tirar algunas ideas, propongo que a un jugador del cuadro perdedor lo cuelguen en el medio del campo deportivo… también podría ser que el cuadro vencedor tenga como derecho, y por una noche, el de poseer a las esposas de los jugadores del otro cuadro… también, y esta particularmente es la que votaría yo, eliminar las tarjetas amarillas y rojas y en su lugar darle el derecho al juez de propinarle una golpiza al jugador a amonestar (a modo de amarilla) o decapitar con una katana al mismo (en caso de que quiera eliminarlo de la cancha).

Pero, ¿por qué razón me molesta que el football se siga jugando como se jugaba en el siglo pasado del siglo pasado? En primer lugar, porque las reglas del fútbol parecieran ser bastante precisas, estrictas e incluso me resulta a mí que no tienen lo que en Lost aprendí que se llama ‘loophole’.

Primero que nada, que el juego se siga manejando primordialmente por la subjetividad de tres tipos que se la tiran de jueces, me parece mediocre. Creo que hoy en día un fulbito en la playa tiene menos subjetividades que esto. Estoy casi seguro que con un poco de tiempo muerto, paciencia y muchas ganas, podría construir con lo que tengo en mi casa tres dispositivos que ayudarían a que el 90% de las reglas del fútbol se cumplieran sin necesidad de recurrir a un ser humano y sus defectos.

Pero esto no lo pido para que podamos dejar de decir ‘uh… ¡siempre nos roban estos!’ o ‘este juez siempre nos hace lo mismo’. No, lo que pretendería con esto es que se minimicen las quejas que tanto jugadores, como personal de los equipos o cualquier persona con algo de ‘poder de convocatoria’ realizan dentro y fuera de la cancha. Quizá esto disminuiría paralelamente los disturbios de las masas ignorantes.

A su vez, y no me parece poco, haría que el deporte más popular (con el que crecen la mayoría de los bajitos y de donde estos toman muchas enseñanzas) fuese más justo. ¡Qué lindo sería que en vez de ‘traiciones’ y ‘mentiras’, hubieran lealtad, honor y se recordara lo que significaba ‘la palabra’.

Si, lo sé… muchos de ustedes estarán diciendo ‘Halcón, esto es un juego de machos... no están jugando a las muñecas’. Si vos sos alguien que sería capaz de decir algo así, te cuento que me das mucha pena, lo lamento pero es así. También te digo, que si la idea es justamente esa, entonces voto por mi plan B, mencionado antes, y yo diría que la indumentaria deportiva de cualquier jugador debería incluir una Maza o un Garrote con clavos y así convertimos a nuestros jugadores en verdaderos gladiadores, y nos dejamos de pavadas con el pastito… ¡CONSTRUYAMOS NUEVAMENTE ARENAS!

Uh… me fui. Bueno… lo que decía… yo me alejé un poco de la práctica del fútbol porque me tenía un poco cansado y me dediqué por un tiempo a otro ‘deporte’ (que en realidad no es un deporte… pero por el bien de este texto lo incluiremos así). Este otro ‘deporte’ justamente me enseñó que efectivamente existe lo que yo busco… ¡Gente, podemos lograr que el deporte número uno del mundo pueda ser además de atrapante y divertido, algo justo! Comentario aparte, ese otro ‘deporte’ también me terminó de enseñar que donde algo dependa de un ser humano, va a haber injusticia y no habrá mayor cantidad de lealtad… sea cual sea la práctica.

Otro punto que me tiene mal, es que por alguna razón el fútbol tiene que ser relatado y comentado por ‘eruditos’. Hubo una época en la que mi odio iba todo para un tal JC y su Romario, pero debo confesar que los mal nacidos que habitan el canal FoxSports (que por suerte ahora está su versión en HD) se han ganado más que mi ira… diría que se ganaron mi ira y mi desprecio (poderosos aliados).

Porque si algún ingrediente le faltaba al fútbol para generar más violencia era una serie de, insisto con este término, ‘eruditos’ que le agregan a este deporte aún mayor subjetividad, convencidos de que su aplicación de la tecnología al fútbol ayuda. Por ponerme de ejemplo, hoy los hubiera prendido fuego… eso si hubiese aprendido a hacer fuegos en mi época de niño explorador.

La verdad tengo claro que esto no va a cambiar, pero también tengo claro que cuando se dice que existe violencia en el fútbol y buscan a los responsables, deberían también buscar por estos últimos en los organizadores de este deporte. Porque me parece a mí que encerrar 60.000 personas en un estadio a ver un despliegue enorme de violencia, deslealtad y falta de honor, sumarle a esto la injusticia así como también algunos eruditos que no saben de lo que hablan, me da un total de disturbios generalizados, vidrieras rotas, turistas lastimados, and so on.

Entonces… ¿es tan loco que agreguemos lo poco que le falta a este deporte para ser completamente bárbaro o cambiarlo un poco para que pertenezca al siglo en el que vivimos? Porque cuando las justas se definen en la arena toda la plebe se va feliz… cuando los partidos son justos, nadie se va triste a su hogar.

Esto es simplemente mi opinión, tan objetiva como la de cualquier erudito.

¡Que gane el mejor y empaten los iguales!

JH.

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